Hasta la capital de Bélgica acuden miles de turistas, y también llegan a ella cualquier día del año cientos de personas en viajes institucionales o de negocios. Por ello la oferta de alojamiento bruselense es amplísima, tanto en el centro histórico de la ciudad, como en torno a la sede de los edificios de la Unión Europea, al igual que ocurre en los barrios alejados del centro. Tal cantidad de hoteles, pensiones y albergues, hace que cualquier persona que viaje hasta Bruselas pueda encontrar un alojamiento acorde a sus posibilidades económicas. Tan solo hay que perder un poco de tiempo en la búsqueda y en la comparativa. No obstante, por aportar unas referencias aquí van una serie de cuestiones a tener en cuenta.
Para todos los bolsillos
Los alojamientos bruselenses hay que decir que por regla general tienen una buena relación entre su precios y la calidad que muestran en sus fachadas, que va de las cinco a una única estrella. Y sin embargo, hay algunos establecimientos que no gozan de excesiva buena reputación. Algo ganado, a veces de forma justificada y otras injustificada, pero que al ser un lugar de paso tan transitado ha ido creciendo con el boca a boca.
Temporada alta y baja
En Bruselas esos términos son muy relativos. La razón es que la mayoría de hoteles pertenecientes a las cadenas internacionales están preparados para el viajante de negocios, y por eso no es extraño que se encuentren verdaderas ofertas para los fines de semana y el verano, cuando desciende la afluencia de viajeros por motivos de trabajo. Por este mismo motivo, hay fechas, sobre todo en primavera y otoño que se hace casi imprescindible reservar con antelación, ya que la ocupación hotelera en Bruselas es muy alta. No obstante, quién decida llegar a la ciudad sin tener un alojamiento reservado, también puede acudir a la Oficina de Turismo de la Grand Place, donde hay un servicio gratuito de reservas para el mismo día.
El centro y los barrios
Los hoteles más exclusivos se encuentran en las inmediaciones de la Grand Place y también en las proximidades de la sede de la Unión Europea. Pero también en esas zonas se pueden encontrar alojamientos más económicos y menos glamurosos. No obstante, saliendo un poco del centro, en los barrios más próximos se pueden encontrar hoteles a precios razonables, o gratos hospedajes con el conocido bed and breakfast, desde los cuales, tanto en autobús como en metro se llega rápidamente al núcleo histórico. Además para los turistas que gustan de alojarse en albergues, es en estos barrios donde encontrarán su habitación, que puede ser más reducida y personal o compartida con otros viajeros.
photo credit: mcosta1973 via photopin cc Escrito por Armando Cerra
