En la Plaza de Mayo de Buenos Aires se encuentra la sede del Poder Ejecutivo, en un edificio conocido como la Casa Rosada, el cual fue inaugurado en 1898.

La Casa Rosada se encuentra en los terrenos donde se ubicaba la Real Fortaleza de Don Juan Baltasar de Austria. Fue construida en tres etapas en las que practicaron tres arquitectos diferentes, Carl Kihlberg, Henrik Aberg y Francesco Tamburini.

El origen de la Casa Rosada se puede considerar en 1850 cuando la fortaleza fue parcialmente demolida para construir la Aduana Nueva. De la fortaleza quedó uno de los edificios que fue reformado como Casa de Gobierno. Fue en esta época cuando Domingo Faustino Sarmiento decide pintar el edificio de rosa para simbolizar la unión de los partidos que protagonizaron las guerras civiles de la primera mitad del siglo XIX.

Fue en 1873, cuando Carl Kihlberg comenzó la construcción del Palacio de Correos en un terreno que había quedado libre tras la demolición del fuerte. Este edificio le quitó el protagonismo a la Casa de Gobierno, por lo que se decidió ampliar y reformar el edificio. Esta reconstrucción comenzó en 1882 y fue dirigida por el arquitecto Henrik Aberg.

Ante la falta de espacio se decide unificar los dos edificios por lo que en 1886, el arquitecto Francesco Tamburini comienza las tareas de unificación, tareas que se prolongarían hasta 1898, año en que se da por inaugurada oficialmente la Casa Rosada.

En 1937, Agustín Pedro Justo, haciendo caso a los intelectuales de la época, decidió demoler el edificio. Gracias a Roberto Marcelino Ortiz el edificio se salvó de la demolición, pues poco después de comenzar las tareas de demolición asumió la presidencia y ordenó suspender dichas tareas. El edificio tuvo que ser restaurado construyendo un nuevo frente.

Los últimos grandes daños sufridos fueron en 1955 cuando la Casa Rosada fue bombardeada durante el golpe de estado llevado a cabo contra el gobierno de Juan Domingo Perón.

El reloj que corona el arco central del edificio fue colocado en el año 2010 siguiendo el diseño original de Francesco Tamburini.

Es posible visitar el interior de la Casa Rosada gracias a las visitas guiadas gratuitas que se realizan los fines de semana. En ellas se realiza un recorrido por los diferentes salones del edificio, todos ellos cargados de historia. Algunos de los salones homenajean a grandes personalidades argentinas, así esta el Salón de los Científicos Argentinos del Bicentenario, el Salón de las Mujeres Argentinas del Bicentenario o el Salón de los Pensadores y Escritores Argentinos del Bicentenario.

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Escrito por Guia Viajero